Ansiedad laboral. ¿El trabajo es la causa de mi malestar?
Dra. Miriam Hernández Soler
En México 19.3 % de la población adulta padece síntomas severos de ansiedad y más de 30% los presenta de forma leve o moderadade acuerdo a datos del INEGI en 2023; lo cual implica que la ansiedad es uno de los padecimientos más comunes en nuestro país.
Muchas personas lo padecen y confunden con otro tipo de padecimientos como enfermedades del corazón, digestivos, nerviosos o dermatológicos,o bien, creen que el padecer preocupación es necesario y acorde a su estilo de vida por el ritmo acelerado y las exigencias de su día a día.
Vivir con preocupación, miedo excesivo, irritabilidad, agitación, estrés intenso y dificultades en el sueño o digestión no es “normal”, ni debe ser justificado como el pago por una vida “exitosa”; narrativa que escuchamos muy comúnmente en personas que han normalizado el padecimiento.
Por ello en este artículo te ayudamos a distinguir cuándo la ansiedad es un aspecto que debemos atender y cómo se visualiza en contextos laborales.
¿Qué es la ansiedad?
La ansiedad es una sensación normal en todas las personas, y se presenta como una señal física que nos lleva a tomar una conducta de “huida, congelamiento o pelea” ante situaciones que interpretamos como peligrosas, amenazantes o potencialmente generadoras de malestar.
Es una reacción completamente normal y adaptativa que tiene nuestro sistema a situaciones que son percibidas como peligrosas; todos sentimos ansiedad, de hecho es fundamental en nuestro abanico de emociones pues funciona como un radar que nos protege y activa a actuar en pro de nuestro bienestar.
¿Cuándo se vuelve disfuncional la ansiedad?
Cuando esta sensación y respuesta de sentirnos amenazados se dispara ante situaciones que no implican un peligro real. Es decir, cuando nuestro sistema se acostumbra a reaccionar a distintas situaciones no amenazantes, como si lo fueran, lo cual resulta desgastante y poco adaptativo para la persona.
Además, otro aspecto a considerar y revisar es su intensidad, frecuencia y duración: se presenta constantemente generando insatisfacción, preocupación y miedo excesivo. Cuando es un episodio intenso, puede ir acompañado de taquicardia, mareos, adormecimiento de manos, sudoración, cambios de temperatura corporal y problemas para dormir
Por tanto la ansiedad disfuncional implica que la amenaza no es real, pero la sensación en nuestro cuerpo, pensamiento y emociones sí, llevándonos a actuar de formas inapropiadas o menos efectivas.
Algunos ejemplos podrían ser estar tan preocupado por las consecuencias catastróficas de presentar durante una junta, imaginando o creyendo que no se tiene la capacidad, conocimientos y habilidades necesarias, por lo que se bloquea la mente y no se logra tener un desempeño que nos genere satisfacción.
O, estar tan angustiado por los pendientes que se te presentan en la vida diaria, que toda tu energía se concentra en pensar sí los terminarás o no, y qué pasaría si no lo hicieras, lo que no te permite actuar y disfrutar las cosas agradables de tu día.
La ansiedad laboral.
En contextos organizacionales, la ansiedad se presenta cuando interpretamos situaciones y peligros vinculados a nuestro trabajo y para su solución será relevante identificar la causa de ésta, para ello podemos distinguir dos panoramas:
- Somos personas que padecemos de ansiedad en nuestra vida en general y por ello también experimentamos desde éste lugar nuestro ambiente y/o desempeño laboral. Es decir, mi preocupación y miedo también lo experimento frente a otros temas de mi vida.
En este escenario, las problemáticas personales, las dificultades con nuestra autoestima que se materializan como el miedo a fracasar, la autoexigencia, la búsqueda de perfeccionismo, estarán impactando mi vida laboral.
O bien,
- Nuestro ambiente laboral es poco saludable, es decir, existen prácticas y mecanismos que impiden el sentirnos a salvo, seguros y/o capaces.
Permanecer en ambientes laborales violentos, exigentes al grado de provocar miedo, poco flexibles, incomprensivos con necesidades humanas más allá de objetivos financieros, con líderes que fomentan el acoso, la incertidumbre y la preocupación generará naturalmente problemáticas en nuestra salud mental, productividad y calidad de vida.
¿Qué hacer?
Independientemente de cuál sea la causa de nuestro malestar, lo más importante será pedir ayuda a profesionales de salud mental; la ansiedad disfuncional no es una problemática que se resuelva con fuerza de voluntad y tiende a agravarse cuando no es atendida.
Si la ansiedad es derivado de una situación laboral, generando así repercusiones importantes en la vida personal y social de los colaboradores en una organización, será crucial implementar mecanismos de cambio cultural, comunicación efectiva, ambiente laboral digno y establecimiento de estilos de liderazgo que fomenten el bienestar.
En ambos escenarios Centro SanaMente cuenta con especialistas que podrán guiar un tratamiento individual, o bien, crear intervenciones organizacionales que promuevan ambientes de trabajo productivos y en bienestar.
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1 De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Recuperado de: https://www.gob.mx/salud/prensa/136-ansiedad-puede-evolucionar-y-convertirse-en-trastorno-de-salud-mental